Despojándose de su apariencia antigua para transformarse en un contemporáneo e iluminado espacio, esta cocina de trazo lineal, limpio y moderno se convirtió en el lugar perfecto para que la propietaria y sus hijas compartan momentos de calidad preparando postres juntas. Como parte del diseño colocamos un tablero de cuarzo, que tiene la temperatura ideal para cualquier tipo de masa. Destacan la adecuada iluminación y elección de acabados que proporciona el toque cálido y acogedor que anhelaban para su lugar favorito.